Pues soy un ser humano, lo mismo que cualquier otro ser humano. Con las mismas inquietudes, miedos, dolores, sufrimiento, incertidumbres......
Tengo muchas facetas, soy una madre, esposa, amiga, amante de la vida y del medio ambiente, soy una luchadora,, buscadora, de la verdad, una soñadora, emprendedora, una hacedora....y sobre todo ando descubriendo quien soy realmente y amo todo lo que hago.
Mientras tomo un café, si quieres tu puedes prepárate otro y lo tomamos juntos y te cuento algo que habla de mi, pero que también habla de ti......
Mi café con un corazón de chocolate....mmmmmm.
Disfruto de todas las cosas que me gustan y una de ellas es , tomar un café con un amigo y sobre todo el chocolate que me lleva a recuerdos de mi infancia (las infancias no son fáciles para nadie).
-No sé lo que quiero- me dijiste mientras saboreábamos nuestro café con caramelo.
-Me siento como si estuviera fuera de lugar, como si no fuera de este mundo, aunque lo cierto es que me observo integrada en la vida.
Permanecí atenta a lo que decías, te veía a ti, te escuchaba con atención.
-Debería hacer algo....no sé...es como si no estuviera disfrutando de la vida, mientras veo a mi alrededor, viviendo con sus trabajos, sus sufrimientos, viviendo sus vidas y...yo...no sé.
A veces pienso que estamos equivocados en las formas de pensar, que nos lleva a hacer lo que hacemos, sin ni siquiera darnos cuenta, sin cuestionarnos nada.
Recuerdo que hace ya unos años, había ido a ver a mi padre al hospital porque estaba recuperándose de un infarto, dimos un pequeño paseo por el pasillo y nos detuvimos delante de una de las ventanas, mientras mirábamos distraídos al exterior mi padre me hizo una confesión.....el "que lamentaba terriblemente el no haber cumplido sus sueños de juventud y que la vida que había hecho no tenia ningún sentido para el".
-¿Para qué me ha servido mi vida?-me dijo- el estar aquí enfermo habiendo dejado atrás lo que yo más quería, lo que más deseaba con toda el alma de aventura.
Me quedé mirándole atentamente con una amarga sensación de profunda tristeza por un instante le veía a el.
-¿Para qué me casé y he tenido unas hijas, un trabajo, una vida que no me ha aportado nada de lo que yo quería?. Yo quería vivir-dijo-quería viajar, recorrer el mundo....Y estuve apunto de conseguirlo, de realizar mis sueños. Un dia-dijo- cuando era joven, salí de mi casa con un hatillo y un poco de dinero, lo habíamos estado planeando un amigo y yo, nos subiríamos a el primer barco que fuera a las "américas". Pero cuando llegamos al puerto y ya apunto de subir al barco, mi amigo se echó atrás y me convenció de que no podíamos irnos a la aventura y dejar lo que ya teníamos seguro.
-Y .....¿para qué?- dijo- con la mirada perdida a lo lejos, como quien ya no espera nada.
Enmudecí de repente, no tenia palabras....no dije nada....sentí un vacío y abandono que se convirtió en libertad.
Le miré y vi claramente la decepción y la angustia en su rostro...el fracaso de no haber conseguido realizar su gran sueño "el ir a la aventura viajando y conociendo el mundo".....
La mayoría de las veces y sin darnos cuenta nos dejamos llevar, influenciar, condicionar por las viejas costumbres o por antiguas frases que se repiten una y otra vez , llegando a generar un habito una creencia, un comportamiento que ni siquiera ponemos en duda, ni inquirimos sobre el, ni lo cuestionamos, dejándonos arrastrar por ellos, convirtiéndolos en parte de nuestros pensamientos acumulándolos en nuestra mente y haciendo de ello una conciencia que se repite en la historia, con la creencia errónea de que los limites nos los han impuesto los demás , dejándonos atrapar por un sistema que nos hace entrar en una caja donde a los que les damos autoridad, ejercen el poder sobre nosotros, utilizando para ello la tiranía el miedo y la incertidumbre y es asi como nos dejamos manejar como títeres y acabamos sin saber quién somos verdaderamente y lo que somos-
¿Qué quien soy yo? un ser humano igual que tu.